Son muchos los motivos por los cuales alguien busca específicamente oraciones para la noche, es por ello que hablaremos sobre un grupo de rezos católicos conocidos como los salmos pues dentro de este grupo de 150 himnos religiosos diferentes se encuentra el salmo 91 y esta es sin duda alguna una plegaria que por sus muchos beneficios representa un poder tan infinito, que se interpreta como aquel escudo protector tan imprescindible para encontrarse libre de todo peligro.
Bien sea que te mueva el anhelo de encomendar tu descanso a Dios, el requerimiento de protección para el periodo nocturno pues en ocasiones este puede llegar a involucrar alguna vulnerabilidad o quizás la necesidad de encontrar alivio frente algunas enfermedades que impiden un sueño cómodo, acudir al salmo 91 es sin duda una opción especial y muy pertinente de la que hablaremos más profundamente a continuación.
La importancia del salmo 91
Si bien inicialmente el sentido de los salmos era establecer un medio de alabanza para Dios, estos paulatinamente fueron tomado diversos propósitos y es así como logra darse esta plegaria, la cual es más que nada un voto de confianza y esperanza que permite depositar diferentes necesidades en el Todopoderoso pues Él en su amor inagotable siempre podrá suministrarnos esas respuestas que tanto anhelamos para poder seguir adelante.
Cada pequeña frase que conforma al salmos 91 dispone de un significativo mensaje que debe ser reflexionado para lograr ponerlo en práctica, es así como se nos habla de misericordia, seguridad, libertad y salvación, palabras precisas para aquietar tanto la mente como el corazón de aquellos que sufren a causa de dificultades tanto de salud como las que guardan relación con inconvenientes para encontrar un empleo o para darle manejo a las tristezas ocasionadas por aquel que busca hacernos daño.
Alivio para el espíritu y el cuerpo
La razón por la cual siempre se recomienda orar el salmo 91 en la noche es porque al ser un símbolo de protección, este es el momento ideal para llenarse de la energía que solo Dios puede proveer, adicionalmente es una forma de asegurar apoyo tanto para el periodo nocturno como para las primeras horas de la mañana .
Acostumbra a fijar un momento exclusivo para meditar esta plegaria, trata de alejarte de las distintas interrupciones y abre el corazón para que estas palabras paulatinamente se vuelvan parte de ti y puedas disfrutar de las ventajas que una oración tan poderosa como esta suele traer a la vida del creyente.